miércoles, 10 de febrero de 2010

Guardería ABC, un mes más de impunidad

Guardería ABC, un mes más de impunidad

05-febrero-2010

Se cumple otro mes de la tragedia en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora en donde perdieran la vida 49 niños. 49 pequeños que murieron de manera estúpida, en un incendio que tuvo como principales cómplices a las autoridades encargadas de dirigir, regular y revisar el lugar.

Son ocho meses ya y los responsables siguen tan campantes en la calle. Ocho meses y la justicia brilla por su ausencia. Ocho meses y la impunidad se burla de las familias de los pequeños fallecidos. Ocho meses y ni el gobierno federal, ni el estatal han mostrado sensibilidad. Ocho meses y sólo el coraje de los padres de familia mantiene en la memoria colectiva una tragedia que no debió suceder.

Más de medio año después del incendio no hay una explicación lógica de qué sucedió, ni mucho menos de quiénes son los responsables.

Otra tragedia más, que bien podría sumarse a Lobohombo, News Divine, Pasta de Conchos y otras tantas sin aclarar. Otro hecho lamentable que viene acompañado de la corrupción, la complicidad y la impunidad.

49 inocentes perdieron la vida y los responsables de la tragedia no aparecen. Y no se trata de señalar sólo a quienes se ostentan como dueños o directivos de la guardería ABC. El castigo, para que la muerte de 49 niños no quede impune, debiera alcanzar a funcionarios municipales, estatales y federales de todos niveles.

Pero parece imposible que así suceda. La mediocridad y tibieza de los responsables no permite albergar demasiadas esperanzas. Desde el Presidente Felipe Calderón, hasta el gobernador de Sonora Guillermo Padrés, pasando por el director del IMSS Daniel Karam, han dejado en claro que el asunto no es prioritario para ellos. No les importa, mucho menos les ocupa.

El incendio en la guardería ABC y la muerte de 49 niños ha exhibido la indiferencia que la clase política muestra ante tragedias como ésta. Sin importar el color partidista, el ex gobernador priista de Sonora Eduardo Bours, o el actual mandatario panista Guillermo Padrés han demostrado, en los hechos, que la vida de esos 49 pequeños no les preocupa.

Cómo olvidar que durante su campaña, apenas hace unos meses, el hoy gobernador Padrés prometía justicia a los padres de los 49 niños muertos. Claro, en pleno proceso electoral, prometer era lo de menos. Pero en los hechos, el actual mandatario ha demostrado su tibieza e indiferencia.

Guillermo Padrés no sólo no ha sido capaz de llevar a cabo una investigación que dé con los responsables, sino que por el contrario, ni si quiera ha sido capaz de dar la cara y afrontar su compromiso. Más aún, con un desparpajo absoluto, ratificó en su cargo al Procurador estatal, Abel Murrieta, quien a todas luces ha sido cómplice de la impunidad que rodea el caso.
 
No podemos tolerar más impunidad. Las familias de 49 pequeños no lo merecen.

49 niños muertos. Todos, de entre 11 meses y cuatro años de edad. Sus padres los dejaron en la guardería ABC de Hermosillo para irse a trabajar. Al final del día, recogieron sus cuerpos sin vida.

¿Y los responsables?

Con coraje e impotencia, las familias de las víctimas demandan justicia.

En este caso, al igual que en otros muchos, huele a corrupción y negligencia gubernamental.

Basta ya de tanta impunidad. Tiene que haber consecuencias. Debe haber detenidos y destituciones de alto nivel. La muerte de 49 niños no puede quedar en un hecho aislado.

Lo ocurrido en Hermosillo, Sonora es un crimen. Y los responsables, directos e indirectos, deberán pagar su incompetencia. Y por un mínimo de decencia, tendrán que salir a dar la cara. Claro, si es que aún tienen un poco de vergüenza.

¿Ustedes cómo la ven?

Vengan sus participaciones

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